Créditos y deudas: ¿Cómo mantener el equilibrio?

Hoy en día es fácil perderse entre créditos y deudas, por eso resulta de vital importancia conocer ¿Cómo mantener el equilibrio? Para sacar provecho de este beneficio sin convertirlo en un perjuicio que afecte otros ámbitos de nuestra vida.

Lee esta guía contentiva de todo lo que debes saber al respecto y toma decisiones acertadas con tus finanzas.

Acerca de las deudas

Adquirir una deuda consiste en obtener un dinero por adelantado para hacer frente a necesidades actuales y aliviar la presión financiera, pero esto solo es factible cuando se cuenta con presupuesto suficiente para pagar dicho préstamo en un lapso de tiempo corto y así evitar que los intereses acaben con tus ahorros.

Endeudarse solo es conveniente cuando cuentas con una buena planificación, de lo contrario puede convertirse en un dolor de cabeza.

En este orden de ideas, puedes correr el riesgo de adquirir una deuda para comprar una vivienda, un coche o iniciar un emprendimiento, pero no es recomendable hacerlo para resolver un problema puntual y especialmente debes evitar hacerlo si no tienes la seguridad de poder devolverlo en el tiempo acordado.

Planificar es la clave para salir ileso de las deudas

Para evitar que las deudas se conviertan en un problema, es necesario elaborar un presupuesto de manera anual o mensual donde se incluyan las mismas.

Según los expertos en finanzas, el límite de la capacidad de endeudamiento de una familia ronda el 35% de los ingresos netos mensuales.

Dentro de este porcentaje se deben considerar los gastos relativos a la devolución de los préstamos y créditos adquiridos, ya sea mediante una hipoteca, pagos a plazos o cuotas de la tarjeta de crédito.

¿Cómo planificar para mantener el equilibrio entre créditos y deudas?

A continuación, encontrarás algunas pautas básicas para planificar correctamente tus finanzas.

  • Mide gastos e ingresos: considera aquellos desembolsos que son fijos (como hipotecas o préstamos) y los variables (como comida y servicios públicos). Por otro lado, contabiliza los ingresos y réstale los gastos para determinar si sobra dinero suficiente para asumir una deuda.
  • Reduce gastos: si el resultado de la operación anterior deriva en una cifra negativa, es necesario reducir gastos. Toma nota de las transacciones que realizas cada día durante una semana y luego elimina aquellas que no sean indispensables.
  • Crea un fondo de reserva para imprevistos: la idea es que puedas contar con algo de dinero para hacer frente a gastos inesperados, estima una cantidad equivalente a tus gastos totales por seis meses.
  • Implementa la regla del 50/30/20: el 50% corresponde al alquiler, hipoteca, recibos y transporte, el 30% estará destinado a compras, salidas y ocio, mientras que el 20% restante será para ahorrar y amortizar las deudas.
  • Cambia de hábitos: si aplicando las medidas anteriores lograste reducir tus gastos pero a la larga vuelves a encontrarte apretado con las finanzas, será necesario tomar consciencia de tus acciones a la hora de gastar y cambiar aquello que sea necesario para retomar el balance.
  • Aprende sobre finanzas: infórmate sobre los productos que puedes encontrar en el mercado para aliviar la carga que supone hacer frente a los gastos cada mes, tales como instrumentos crediticios de las entidades bancarias y sus beneficios.
  • Asesórate con un experto: si a pesar de haber aplicado todo lo anterior no consigues los resultados que esperas, busca ayuda profesional para gestionar tus finanzas.

Recomendaciones finales

Pon en práctica las siguientes recomendaciones para evitar que las deudas te quiten el sueño:

  1. No adquieras un nuevo préstamo hasta que hayas pagado el anterior.
  2. Si es posible, utiliza la tarjeta de débito antes que la de crédito para evitar los intereses.
  3. Evita las soluciones fáciles y rápidas que ofrecen algunas entidades bancarias y cuyos riesgos desconoces.
  4. Cambia tus hábitos para eliminar gastos innecesarios.
  5. Apégate a la planificación financiera.
  6. Si el nivel de endeudamiento es demasiado alto, acude a una institución financiera de confianza para crear un plan de pagos conveniente.

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